Un proyecto ubicado en el centro de la ciudad de Toluca, un proyecto sembrado dentro de una preexistencia, una casa de mediados de los sesentas, de un estilo moderno muy de acuerdo al momento que se construyó. Siendo esta situación uno de los principales desafíos, el dotar al proyecto de un equilibrio entre lo contemporáneo y lo moderno.
En cuanto a la estructura, hubo que hacer una reestructuración total, para así poder dar sustento al nuevo proyecto, la intención principal fue generar claros más amplios y a su vez una estética más limpia para todos los espacios. Dicha intervención nos permitió conservar una fachada frontal muy privada y cerrada que de pronto da pie a un interior completamente abierto.
Como el centro de todo el proyecto, tomamos un árbol de olivo que ya habitaba el inmueble y los convertimos en el actor principal. Para conseguir un protagonismo más dramático y con la idea de inyectar luz al interior, se creó un vacío en la losa tapa para acentuar todo el vestíbulo donde se encuentra el olivo. De forma paralela este espacio es abrazado por una escalera, que es un guiño al encuentro de lo contemporáneo con todo lo existente.
La preexistencia, tenía como gran tema, la iluminación, que en el mejor de los casos solo tornaba a los espacios muy fríos, por lo que una de las grandes labores de la intervención fue incorporar la calidez. Para conseguirlo, inyectamos luz natural, y donde no hubo esa oportunidad, se eligieron materiales cuyos colores y texturas, nos permitieran generar un ambiente más amable.